Urge que alguien le indique una ruta en Comunicación al presidente municipal de Atlacomulco. En serio. Es por su propio bien y el de los mismos atlacomulquenses.
Por supuesto, no se trata de enredarse en la bandera y arrojarse al vacío, pero que alguien le explique al alcalde y sus comunicólogos que son gobierno y no oposición.
Todo comenzó con el asunto del árbol derribado en el Centro Cultural Regional Lic. Isidro Fabela Alfaro. Llamó la atención porque era un árbol bastante antiguo y por la falta de claridad al exponer los motivos para que fuera abatido.
Para entender cómo se dio este proceso, la revista d´interés publicó hacia el medio día una investigación documental y gráfica sobre ello (https://bit.ly/2HzMukc); hecho que, por sí mismo, dignifica la labor periodística de la región, donde algunos "medios de comunicación" se limitan a publicar sus opiniones, sueños, frustraciones o percepciones como hechos irrebatibles.
Sea como sea, lo cierto es que el trabajo que hizo d´interés debimos verlo mucho antes a través de los conductos oficiales del ayuntamiento de Atlacomulco, ya fuera en su página web o en Facebook.
Pero no ocurrió así y ahí están las consecuencias. Una serie de rumores por parte de priistas aún lastimados por la derrota, y el errático actuar de morenistas sin idea de lo que hacen.
¿Quién le aconsejaría a Roberto Téllez que publicara en su Facebook personal la solicitud que se hizo ante la Dirección del Medio Ambiente y Recursos Naturales de Atlacomulco, para la poda y derribo de árboles? ¿No sabe que el ayuntamiento ya cuenta con espacios oficiales para hacer pública esta información? ¿No tiene quién lo asesore? ¿No lo permite?
Peor aún. En la página de Facebook oficial del ayuntamiento de Atlacomulco -donde se esperaría un poco de mesura y profesionalismo-, en lugar de expresar cómo, cuándo y por qué se llevó a cabo esta acción, se ponen a pelear (https://bit.ly/2TUcrkQ) con otra página de la que ni siquiera saben quién maneja, otorgándole con ello una categoría que no tiene.
Ignoro quién maneje las redes sociales del ayuntamiento, pero, evidentemente, no tiene ni el oficio ni la práctica como para hacerlo.
¿Pelear con un don nadie, en lugar de aclarar? ¿En serio?
Párvulos.
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